El titular de la Segob, Javier Aquino Limón, insta a la empresa y al sindicato a evitar un paro que afectaría a miles de familias poblanas.
La amenaza de una huelga en la planta de Volkswagen Puebla ha encendido las alarmas sobre el impacto que podría tener en la economía del estado. Como uno de los principales motores económicos de Puebla, la planta no solo proporciona empleo a miles de trabajadores, sino que también sostiene la estabilidad financiera de muchas familias y negocios locales que dependen de su operación.
Ante esta situación, el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob) en Puebla, Javier Aquino Limón, hizo un llamado a la empresa, al sindicato y a los trabajadores para que actúen con responsabilidad y busquen una solución que evite una paralización de actividades. Aquino Limón enfatizó que una huelga no solo afectaría a los empleados directos de Volkswagen, sino también a una vasta red de proveedores, comerciantes y pequeños empresarios que dependen de la planta para subsistir.
«Volkswagen no solo es una empresa, es un pilar fundamental para la economía de Puebla. Un paro laboral podría tener un efecto dominó que impactaría a miles de familias que dependen directa e indirectamente de esta planta», señaló Aquino Limón.
La planta de VW en Puebla es una de las más importantes del país, y cualquier interrupción en su producción podría traducirse en pérdidas millonarias para la economía local y en una incertidumbre significativa para la comunidad. Las autoridades y expertos advierten que un paro podría erosionar la confianza en el mercado laboral de la región y retrasar la recuperación económica que el estado ha experimentado en los últimos años.
Aquino Limón instó a las partes involucradas a priorizar el diálogo y la negociación como la vía para resolver las diferencias, recordando que la estabilidad de muchas familias poblanas está en juego.
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